lunes, 8 de julio de 2019

Un groso Badía


El 29 de junio del 2012 se fue Juan Alberto Badía. Una de las cosas más grosas que hizo, fue la de acortar la brecha entre dos generaciones, la de padres e hijos, que en los 80's continuaban bastante distanciadas musicalmente (y en otros 100 aspectos también). En este caso puntual, al plantarse como un nexo natural entre ambas por su abierta popularidad, siendo un tipo muy respetado intelectualmente y apreciado como personaje público, le dio una legitimación al rock ante el resto de la sociedad -sobre todo al rock nacional- que antes casi no tenía entre el público adulto de entonces.

Este libro, que aun conservo, lo leí a mis 15 años, y me llevó en tren a Ramos Mejía a vivir un simpático y emotivo viaje mágico y misterioso con él y John, que andaba de incógnito en el país, y se hacía amigo de Juan.

Solo por estas dos cosas, entre tantas, y por los sábados de "Badía y Cía." frente a la tele con mis abuelos: gracias capo, buen trip.


miércoles, 3 de julio de 2019

Cuando era un caracol

yo tenía una casita hermosa
acá cerca y hace tiempo
flotaba en un almíbar
y mi amigo era el silencio.

yo tenía una casita cálida
y me soñaba el mismísimo sueño
el sueño de tenerme entre tus brazos
como ahora aun nos tenemos.

yo tenía una casita redonda
de luz ámbar y sin rejas
yo tenía una casita hermosa,
en la panza de mi vieja

Para Nélida Irma del Pizzo, mi mamá.



Nunca nos fuimos

Qué tal
Retomando el blog
Recapitulando eructos mentales del Facebook
(no sé a quien le hablo ni a quien le escribo, aparte de mí.
Acá se siente como un parque de diversiones abandonado.)

23 de diciembre de 2010

te tenemos allí
abandonado allí
preso como un animal
como un animal feroz
así las cosas,
la fiera más fiera
¿dónde está?